Quiero aclarar que este artículo en ningún sentido es partidista, hago uso de mi derecho a reservarme mis inclinaciones políticas, es un comentario objetivo sobre una nación que necesita a Dios, su Salvación en Jesucristo y su Palabra como norma de vida.
En México, mi Patria terrenal, a la que a Dios le placio ponerme como si fuese embajador de Cristo para proclamar su Glorioso Evangelio de la Gracia, empieza un nuevo sexenio de Gobierno, un nuevo presidente está a cargo. Dentro de la gran controversia que se ha creado, su campaña giró alrededor del tema de la corrupción, siempre envuelta en culpar de las desgracias y pobreza de mi patria, a un grupo corrupto de funcionarios, esto fue una oportunidad para prometer que todo terminaría si acabamos con un gobierno corrupto, la pregunta sería ¿Esto es Verdad? ¿en verdad un País será transformado si cambiamos de Gobernantes? ¿transformados en que? ¿o qué rumbo tendrá esta transformación?
Sin intentar profundizar en temas soteriológicos, entendemos que el corazón del Hombre es perverso por naturaleza (Jeremías 17:9) no solo el de las personas que trabajan en la política, no solo los gobernantes corruptos tienen este corazón perverso, sino también el de todo ciudadano; podríamos decir que caminamos entre personas con corazones corrompidos por naturaleza y cada uno inclinado a sus concupiscencias.
Dentro de un país como México que cuenta con 123.5 millones de habitantes, con la naturaleza caída, la cuestión sería ¿Cuántos son temerosos de Dios? esta pregunta me inclinaría a hablar de muchísimos temas pero quiero dirigirme a dos en específico; primero, la familia Cristiana y su desempeño de Adoración, y la segunda; la Idolatría de mi País y la proclamación del Evangelio
La familia Cristiana y su desempeño de Adoración
En el primer punto, todos entendemos que la base de la sociedad desde el principio es y será la familia, pues como “Scott T. Brown” escriben en el libro (Una Teología de la Familia), “siempre que Dios quiso hacer algo maravilloso uso una familia”, usó la familia de Noé para preservar la simiente justa, uso la familia de Abraham para bendecir a las Naciones, uso una familia para que viniera nuestro Redentor, los Cristianos somos una Familia en Cristo Jesús, etc. la familia fue , es y siempre será una aspecto principal en el plan de Dios, el punto aquí, es que mientras una sociedad no tenga familias temerosas de Dios, una nación será hundida en diferentes miserias.
Profundizando más en el tema, nos tendríamos que preguntar ¿Cuántas familias son Temerosas de Dios? y dentro de ellas ¿cuántas practican la Adoración familiar? ¿En cuántos hogares se lee la Biblia diariamente regocijándose en sus benditas promesas siendo transformados por esa palabra viva y Eficaz? ¿Cuántas familias oran a Dios fervientemente unos por otros en la búsqueda de su bendita voluntad? En síntesis, el individuo pende del lazo familiar y si esa familia está en reverente Adoracion a Dios expuesta a su Poderosa y Santa Palabra, podemos decir que ese individuo que forma parte de una sociedad, conforma y favorece al crecimiento de una nación, como resultado tendremos una nación forjada bajo las Sendas del Señor, como lo fue Norteamérica con la llegada de los puritanos en el del Mayflower, la cual es la primer potencia del mundo al ser una sociedad fundada en la Palabra del Señor.
Mi primer invitación, es hacia la reverente práctica de la Adoración Familiar, ¡Restauremos la Adoración familiar! ¡No dejemos el trabajo a otros y empecemos con nuestra familia! ¡Adoremos a Dios y enseñemos a nuestra familia el camino excelso del Altísimo!
La Idolatría de mi País y la proclamación del Evangelio
En Segunda instancia, hablaremos de la evidente rebelión de mi País contra Dios, sin intención de agraviar, seré objetivo, México cuenta con diferentes tipos de cultos religiosos que deshonran a Dios, desde la santería y el ocultismo hasta la adoración de Imágenes de la Iglesia Católica Romana Apostólica, pues, en (Éxodo 20) Dios mismo deja en claro sus exigencias y castigos al respecto:
“Éxodo 20:1-6 Y habló Dios todas estas palabras, diciendo: Yo soy Jehová tu Dios, que te saqué de la tierra de Egipto, de casa de servidumbre. No tendrás dioses ajenos delante de mí. No te harás imagen, ni ninguna semejanza de lo que esté arriba en el cielo, ni abajo en la tierra, ni en las aguas debajo de la tierra. No te inclinarás a ellas, ni las honrarás; porque yo soy Jehová tu Dios, fuerte, celoso, que visito la maldad de los padres sobre los hijos hasta la tercera y cuarta generación de los que me aborrecen, y hago misericordia a millares, a los que me aman y guardan mis mandamientos”.
No hace falta ser descriptivo para que todos afirmamos que México es una Nación Idólatra, ahora hasta idolatran a el Presidente, creen que él tiene el poder de sacar de la miseria a un Pueblo, Dios dice en su Palabra (2 Crónicas 7:14);
“si se humillare mi pueblo, sobre el cual mi nombre es invocado, y oraren, y buscaren mi rostro, y se convirtieren de sus malos caminos; entonces yo oiré desde los cielos, y perdonaré sus pecados, y sanaré su tierra”.
Si tan solo mi pueblo se humillare, si esta nación tan bendecida por Dios se rindiese a Él y lo glorificaran conforme a su Santa Palabra, si creyeran en Jesucristo como su único y suficiente Salvador, si se arrepintieren de sus pecados y se volvieren a los caminos de su creador, el sanaría su tierra. Un individuo sanado por el poder regenerador del Espíritu Santo es potencialmente inclinado a iniciar la Adoración personal y Familiar, con la genuina y reverente práctica de la Adoración Familiar tenemos más hombres y mujeres forjados bajo el modelo Bíblico, ahí sí tendríamos un verdadero cambio y a pesar de ello, nuestra esperanza ya no estaría en esta tierra maldecida por Dios a causa de la desobediencia de Adán, si no en algo infinitamente mejor, en cuerpos incorruptibles, a lado de nuestro Glorioso Señor y Salvador por la eternidad.
Pero “¿Cómo, pues, invocarán a aquel en el cual no han creído? ¿Y cómo creerán en aquel de quien no han oído? ¿Y cómo oirán sin haber quien les predique?” (Rom 10:14)
Desgraciadamente el 90 % de las Iglesias denominacionalmente Cristianas, no predican verdaderamente el Evangelio, pues algunas ni siquiera lo conocen y las que sí, no tienen la pasión de llevar las buenas nuevas de Salvación. Tal parece que el Creyente ahora está más interesado en la Política, Deportes, Moda, Negocios, Entretenimiento, que en la proclamación del Evangelio,
¿Desde cuándo nuestra esperanza es terrenal? El Apóstol Pedro dice que "el fin de vuestra fe, que es la salvación de vuestras almas" (1 Pedro 1:9)
!Proclamemos fielmente el Glorioso Evangelio de la Gracia y restauremos la Adoración Familiar, seamos luz a las Naciones¡
(Mateo 5:14-16) “Vosotros sois la luz del mundo; una ciudad asentada sobre un monte no se puede esconder. Ni se enciende una luz y se pone debajo de un almud, sino sobre el candelero, y alumbra a todos los que están en casa. Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos.
Este escrito solo tiene el fin de recordarte cosas prácticas del Cristianismo, que a pesar de ser tan importantes, como la Adoración Familiar y la predicación del Evangelio, pareciese que las han dejado en el olvido.
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